Página 12 has an interview with uan Casamayor Editor of Páginas de Espuma, one of my favorite publishers right there with Open Letter. They specialize in short stories and have published some great works by some of the best in short stories (see my reviews of Navarro and Neuman). The interview talks about the press, its history, and the craziness of the publishing industry, which functions in Spain much like it does in the US.
–Un latiguillo frecuente, dicho por muchos editores, es que los libros de cuentos no venden. ¿Qué diría para desmontar este “mito” o prejuicio?
–El primer hecho incontestable es que trece años después una editorial que empezó partiendo de una pareja que decide buscar un hueco muy especializado ya no es una editorial pequeña por facturación. Páginas de Espuma está facturando en torno a los 800 y 900 mil euros; es una facturación fuerte. Las cifras son públicas. Los libros de cuentos se venden. Otra cosa es que se quiera vender cuentos. Si partes de la filosofía que el libro de cuentos es un descanso de novelista o una cláusula de un contrato, el posicionamiento ya no comercial sino editorial es endeble para vender el libro. Yo hago giras en España por catorce ciudades con un libro de cuentos. Además tenemos un premio de 50.000 euros al mejor libro de cuentos que compite con cualquier premio de novela. Claro que para esto me busqué a alguien que tuviera la plata para poder financiarlo. Ribera del Duero está muy contenta con este premio porque ha posicionado su marca de origen de un vino en un mundo cultural que les ha interesado mucho. No tengo otra vía de ingresos. Aunque mis padres son médicos, soy un poco espartano. Y si bien me dieron un poquito de dinero para arrancar con la editorial, vivo exclusivamente de lo que dan los libros. Algo tiene que vender el cuento para mantener Páginas de Espuma, ¿no?