Literal Magazine has a short story from Fabio Morábito. For those of you don’t know who he is, he is a Mexican poet and fiction writer. He is well known for his poetry, although I haven’t read any of it, and received unending praise for his novel Emilio, los chistes y la muerte which I reviewed some time ago. This story is interesting and in someways funny. Worth a read if you can read Spanish (I’m not sure how Google Translate would do, it still has problems with getting the gender right in pronouns.)
Está lejos de la parte más concurrida de la playa y, como de costumbre, mientras camina, mira las huellas de los bañistas en la arena. Le gustan los sitios apartados, donde las huellas son escasas y puede observarlas mejor. Mira el rastro de una madre y de su niño, que va en sentido contrario al suyo. Son pisadas de dos o tres horas atrás. Piensa que una mujer no se habría aventurado sola cargando a su niño hasta ese punto de la playa, así que también debió de acompañarlos el padre, cuyas huellas han desaparecido porque seguramente caminaba más cerca de la orilla y han sido borradas por el agua. Las del pequeño, que aparecen y desaparecen a intervalos regulares, indican que su madre lo cargaba, lo bajaba durante un rato y volvía a cargarlo. Donde sus huellas están ausentes, las de la madre se ven más delineadas por el mayor peso que sus pies soportaban en ese momento y el arco dactilar de ella se observa dilatado a causa del movimiento instintivo para proporcionar al cuerpo una mejor base de equilibrio. Él nunca se cansa de ver las alteraciones que tienen lugar en la anatomía del pie de una madre cuando ésta carga a su crío; incluso ha observado que la dilatación del arco dactilar se da espontáneamente en muchas mujeres con sólo mirar a un bebé.